MAKTUB (Beginning) Audiolibro / Fotonovela

MAKTUB

(Beginning)

Al caer la tarde, en la ciudad considerada como la sucursal del cielo, las aves emprenden sus últimos vuelos del día y cantan anunciando que sus labores de la jornada están por llegar a su fin, la brisa baja por los cerros y da a los citadinos una grata sensación de frescura digna de un buen trópico. En el barrio conocido como Los Álamos se está llevando a cabo un bazar navideño de los que podrían competir a nivel mundial por creatividad y excelente gastronomía que hace que los visitantes vivan la experiencia más agradable de sus vidas, pues los habitantes son dignos anfitriones, cuya principal prioridad es hacerte sentir como de la realeza, calles impecables en limpieza y amabilidad que desborda toda expectativa son el común denominador.

Un sonido estruendoso llama la atención de los transeúntes quienes salen corriendo hacia la esquina principal en la cual ven a un hombre alegando y gritando con todas sus fuerzas a una linda chica de la comunidad, en ese momento alguien grita; ¡Hey, pero si es Julieta la del problema!. Julieta era conocida por todos como la chica más amable del planeta, su sentido humanitario solo era superado por su dulzura, razón por la cual los vecinos estaban anonadados de verla envuelta en una discusión con una persona que estaba tan alterada que su rostro parecía que iba a explotar por la concentración de sangre en su cabeza, ciertamente el sujeto estaba más que enfadado.

Un amigo de Julieta, al ver que este hombre la estaba ultrajando con sus palabras, acude en su ayuda y se dispone a agredirlo con un palo qué encontró al lado de la carretera, en eso, Julieta se interpone y le dice que así no se solucionan los problemas, que la violencia sólo generaría más violencia, el amigo accede a tomar su consejo y suelta el palo, a lo que ella dice con voz dulce a la persona eufórica; Te pido disculpas si en algo te he ofendido, y si te he perjudicado de alguna manera prometo resarcir mi error, pero para ello necesito entender qué te tiene tan molesto, pues no he logrado comprender porque tu tono de voz está un poco elevado. El hombre, al ver la reacción de Julieta, respiró profundo y le dijo; no te hagas la inocente, sé muy bien que fuiste tú quién dañó mi carro cuando estabas parqueando el tuyo y tuviste el descaro de irte de la escena, Julieta lo mira con comprensión y le dice; entiendo tu molestia, veo que han golpeado fuertemente tu carro, pero creo que me confundes, pues no sólo no tengo carro, sino que tampoco conduzco vehículo alguno diferente a mi bicicleta. Ante tal desconcierto el hombre se disponía nuevamente a increparla, cuando de pronto llega una chica un poco asustada con alguien a su lado e interrumpe la discusión diciendo; siento mucho haberme apartado de este lugar, me puse nerviosa al chocar este carro y fui a llamar inmediatamente a mi agente de seguros quien está aquí para darte todas las garantías para el arreglo de tu vehículo.

El dueño del carro accidentado se queda totalmente perplejo ante la situación, se da la vuelta, y se dirige a Julieta mencionándole; eres el tipo de persona que necesita este mundo, pues aún teniendo la razón, preferiste disculparte por algo que no habías hecho en vez de contestar a mis reclamos con toda la autoridad que te facultaba la situación, te pido mil disculpas y te quiero dejar mi tarjeta, si algún día llegas a necesitar algo de mi no dudes en pedirlo, a lo que Julieta con la misma tranquilidad que la caracteriza le responde que no hay inconveniente alguno, que comprende su reacción, pues una confusión la puede tener cualquiera, luego se despide con una amable sonrisa en su rostro y le dice a los espectadores que doña Berta ya debe tener las empanaditas calientes, que el bazar apenas está comenzando y con una sonrisa aun más grande se va en medio de la multitud.

Es lunes en la mañana y Julieta se dispone a comenzar sus labores matutinas antes de salir para la Universidad donde estudia Comunicación Publicitaria. Su despertador suena a las 5:00 a.m. y, abrazando su almohada se pone de pie, pone play a su disco favorito de Calamaro y comienza con sus actividades acostumbradas. Después de hacer su almuerzo y arreglar todas las cosas pertinentes, sale a abordar el transporte masivo de la ciudad llamado “MIO”. En el camino se cruza con el vigilante comunitario a quien siempre le obsequia una manzana, pues acostumbra comer una en el trayecto y compartir la otra con él.

Al estar en la estación donde acostumbra abordar el MIO, espera como siempre leyendo un libro mientras llega la ruta que la llevará hasta la universidad. Estando atrapada por la historia que le plantea la lectura, empieza a tararear de manera inconsciente la canción que más le gusta; “flaca”, cuando sin darse cuenta se encuentra cantando un poco fuerte, cuando diagonal a ella, como si tratara de un Déjà vu, se percata de que está cantando la canción con un chico el cual a su vez voltea y cruza la mirada con la de Julieta, ambos sonrien, siguen cantando juntos, y ella se sonroja porque le parece un chico muy lindo, él también siente una fuerte conexión con ella; “si el amor a primera vista existe podría escribir cien libros de este mismo instante”, pensó Dante suspirando y con el corazón palpitando a mil latidos por minuto. Siendo las 6:30 a.m. el autobus llega a la estación y ambos se disponen a subirse, cuando de repente Dante percibe que algo se le cae a Julieta, así que se devuelve a recogerlo, en eso el bus arranca y él se queda en la estación impotente por no haberle preguntado su nombre o algún dato para contactarla en una próxima ocasión.

Al regresar a su casa de noche, Dante se acuerda de que había guardado el objeto que se le cayó a esa linda chica en la estación de buses, abre la caja y era un collar con el nombre “Julieta” y en la parte de atrás tenía una dedicatoria de su padre. Dante recuerda el momento especial que vivió con esa chica en la mañana y siente que ella despierta en él algo más que un simple gusto, realmente quedó flechado por ella, así que recordó que ella esperaba la ruta de los campos universitarios, así que decide buscar en las redes sociales mujeres con el nombre de Julieta que residan en Cali, sin embargo se convierte en algo infructuoso, pues los resultados arrojados por la búsqueda sobrepasan las quinientas personas, así que decide escribirle a todas.

Pasadas tres semanas buscando a aquella linda chica de ojos achinados, ve que sus esfuerzos no lo llevan a ninguna parte, por tal razón prefiere dejar de buscarla, pues es como buscar una aguja en un pajar, piensa Dante, así que decide retomar su tiempo libre el cual aprovechaba en su gran pasión; la música. Al transcurrir los días, Dante siente que no logra sacarse de la mente a aquella chica, así que cada noche contempla el collar y pide a la luna que la cuide, pues un ser tan lindo como ella merece ser tratada como a una princesa.

Cierto día, Dante sale con sus amigos a cine y ve en la fila de la confitería aquel lindo cabello negro como la noche, sedoso y con brillos cautivantes, cual comercial de shampoo, así que arranca a correr, y de manera entusiasta la saluda diciéndole que la ha pensado mucho!, la chica se voltea a corresponder el saludo del que pudiera ser un posible conocido, al verlo lo increpa por ser tan confianzudo, jamás en la vida te he visto, responde esta chica. Dante se queda congelado, pues pensó haber encontrado a aquella “chica” que lo había cautivado y a la cual recordaba todos los días. Con una inmensa vergüenza se da vuelta y disculpandose se retira del lugar, sus amigos que estaban comprando las boletas para la función, comienzan a burlarse de él por el ridículo que acaba de pasar y le dicen que ya es hora de que olvide a aquella mujer, Dante no les responde, pero piensa que lo mejor es sacarla de su mente.

Como es esperado, la temporada de cierre de semestre en la universidad demanda de gran esfuerzo y tiempo, pues los trabajos son muchos y de un alto grado de dificultad. Dante está preocupado en especial por un trabajo que le dejaron en una materia en particular, pues debe realizar una narrativa transmedia y dispone de poco tiempo para realizarla. En aras de efectuar un buen trabajo y conseguir una buena nota, ya que en el corte anterior quedó indignado porque todo su esfuerzo no se vio reflejado en la nota que le otorgaron, decide ir a una librería a tomar ejemplos de algunos escritores sobre cómo narrar una historia y hacerla interesante para la profesora con el firme propósito de tocar su corazón y que esta vez su nota dignifique todo su esfuerzo y creatividad.

En la librería, el reto es escoger el libro indicado, la oferta es muy amplia y Dante se encuentra ya un poco frustrado por todo lo que tiene pendiente por realizar. Decide buscar autores que hayan escrito sobre romance, pues hace poco escuchó una historia de amor que se desarrolló en el MIO, donde una chica conoce a un chico que iba a trabajar en un centro médico, el cual se sienta al lado de aquella mujer y le pone conversación de forma muy casual, y al llegar ella a su parada él le pasa su número telefónico un poco nervioso pero a la vez encantado de conocerla, ella lo recibe y luego por curiosidad decide escribirle dándose cuenta entre mensaje y mensaje que tienen mucho en común, convirtiéndose en el comienzo de una linda relación que a través del tiempo se fue fortaleciendo y transformándose en un ejemplo de esperanza y perseverancia para quienes aún desean creer en el amor.

Dante vé a lo lejos la sección de romance, va y busca un libro en especial que le habían recomendado, sólo quedaba un ejemplar, lo toma y lo lleva al lugar donde se cancela. Un asesor que pasaba le informa que si va a llevar ese libro tiene derecho a escoger otro del mismo autor completamente gratis. De inmediato deja el libro en el lugar de pago y se dirige de prisa a buscar el otro libro, feliz por la buena suerte que lo rodeaba ese día, toma lo que buscaba y vuelve para pedir que le hagan la factura por su compra, en el instante, la persona que maneja la caja registradora le informa que el libro que estaba al lado del mostrador fue vendido hace un momento a la persona que acaba de salir, vé a un hombre retirarse del establecimiento con su libro y sin dudarlo ni un segundo sale a hacerle el reclamo, cuando estaba por alcanzarlo, se percata de que aquel hombre le obsequia el libro a una chica que lo esperaba afuera, y como si el destino se deleitara por ser cruel de las maneras más irónicas, Dante mira con un profundo dolor en su alma que aquella chica que estaba recibiendo el libro era Julieta, aquella mujer que por primera vez y en tan solo pocos minutos le hizo sentir cosas que jamás había sentido por nadie, y en este momento se encontraba abrazando a otro hombre de manera entusiasta en agradecimiento por aquel obsequio.

Paralizado y absorto por la escena, Dante se queda mirando de frente aquella situación y con una lagrima que se escapa de sus ojos, da la vuelta lentamente, y al comenzar a alejarse escucha que alguien le grita; “¡Hola chico Calamaro!”, sabía que era ella, esa dulce voz es imposible de olvidar, pero… ¿cómo reaccionar?, pensaba Dante sin lograr ordenar sus ideas, cuando de repente ella salta y se le pone de frente y le dice con una sonrisa en su rostro: ¿a caso te has quedado sordo por escuchar tan duro tu música? No, para nada, es sólo que no quería interrumpir tu momento con tu novio, pero me alegra mucho verte, responde Dante. ¡Sí, lo amo! dice Julieta. En ese momento sintiendo que el mundo se desmorona, Dante contiene sus fuerzas para no llorar delante de ella, pero Julieta continua diciendo; no es mi novio, es mi hermano que hace poco llegó del extranjero y vino directamente a comprarme un libro que he buscado por mucho tiempo, a lo lejos se escuchaban unas campanas sonando y el paso de los carros en total sincronía como si estuvieran en una pista de carreras, los pajaros cantaban al unísono y parecian alinearse al volar formando figuras perfectamente creadas.

Dante sonrie y le dice que tiene una sorpresa para ella desde aquel día en la estación de buses, pero que se lo daría si ella le acepta ir a tomar un café, a lo que ella responde: no, no voy a ir a tomar un café contigo. Dante queda enmudecido por su respuesta, así que ella continúa diciendo, mejor invitame a cenar, quiero que tengamos una cita romántoca como la pareja del libro, es una excelente idea responde Dante, en ese momento Julieta toma su mano y con un marcador le escribe: este es mi número, no laves tus manos hasta que lo hayas guardado en tus contactos… y añade al lado una carita feliz, le da un beso en su mejilla y le dice: estaré lista a las 8 p.m. no faltes, y se retira con su hermano, mirando hacia atrás al caminar y sonriendo como aquella vez en la estación del MIO.

La vida está llena de experiencias, unas dulces, otras no tanto, pero de lo que sí podemos estar seguros es que en la vida de todos está presente MAKTUB guiando nuestros destinos, pensaba Dante mientras se retiraba lentamente caminando en la realidad que siempre deseó y que ahora era suya. 

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